Historias para no dormir y si soñar nº2

Echo de menos tus abrazos, los más largos del mundo. Echo de menos pasear de tu mano, bien fuerte. Echo de menos que se te frunza el ceño sin querer cuando digo una estupidez y no puedes disimularlo. Echo de menos que me pegues bromeando y luego me pidas perdón a besos a sabiendas que no me ha dolido. Echo de menos llevarte a los rincones más oscuros para ver las estrellas. Echo de menos tu beso en mi nariz cada mañana, y tu mano en mi pelo cada noche.
Echo de menos tu “yo también” tras cada “te amo”, echo de menos que me despierte el teléfono, echo de menos la marca de tu almohada en mi cara, echo de menos cada gesto, cada palabra, echo de menos sentirme extraña, porque para mí echarte de menos se ha convertido en una maldita costumbre, me acostumbre a ser infeliz, a llorarte…
Y se me hace imposible la costumbre de seguir echándote de menos…

(c) Marta Suárez Cota

No hay comentarios :

Publicar un comentario